Es la evitación de los sentimientos a través de la diversión. Esta
evitación es la columna vertebral de la industria del entretenimiento y de la
fabricación de bebidas espirituosas, y también es la vía del adicto al trabajo. El
escapismo, evitar tomar conciencia de nuestro interior, es un mecanismo
tolerado socialmente. Podemos evitar el propio yo y tapar los sentimientos a
través de una interminable variedad de búsquedas, muchas de las cuales se
convierten en adicciones a medida que crece nuestra dependencia de ellas.
La gente está desesperada por seguir siendo inconsciente. Observamos que, a
menudo, las personas encienden la televisión en cuanto entran en una
habitación, y luego caminan por ella en un estado cuasi onírico, constantemente
programados por los datos que provienen de ella. A las personas las aterroriza
la idea de enfrentarse a sí mismas. Incluso temen un momento de soledad. De
ahí las actividades constantes y frenéticas: la interminable socialización, hablar,
enviar mensajes de texto, leer, escuchar música, trabajar, viajar, hacer turismo, ir
de compras, comer en exceso, los juegos de azar, el cine, las píldoras, las
drogas y las fiestas.
Muchos de estos mecanismos de escape son erróneos, estresantes e
ineficaces. Requieren enormes cantidades de energía para mantener el control
sobre la creciente presión de los sentimientos suprimidos y reprimidos. Se
produce una progresiva pérdida de conciencia, de creatividad, de energía y de
auténtico interés por los demás. El crecimiento espiritual se detiene y,
finalmente, se desarrollan enfermedades físicas y emocionales, se producen el
envejecimiento y la muerte prematuros. El escape de estos sentimientos
reprimidos da como resultado problemas sociales y el aumento del egoísmo y de
la crueldad que caracteriza a la sociedad actual. Por encima de todo, el escape
tiene el efecto de incapacitar para amar verdaderamente y confiar en otra
persona, lo que produce aislamiento emocional y odio hacia uno mismo.
En contraste con lo anterior, ¿qué sucede cuando, en lugar de esto, nos
liberamos de un sentimiento? La energía que está detrás de ese sentimiento es
entregada instantáneamente y el efecto es la descompresión. La presión
acumulada disminuye a medida que lo vamos soltando. Todo el mundo lo sabe:cuando soltamos, de inmediato nos sentimos mejor.
La fisiología del cuerpocambia. Hay mejoras detectables en el color de la piel, la respiración, el pulso, la
presión sanguínea, la tensión muscular, la función gastrointestinal y la
composición química de la sangre. En un estado de libertad interior, todas las
funciones del cuerpo y de cada órgano se corrigen hacia la normalidad y la
salud. Se experimenta un aumento inmediato en la potencia muscular. La visión
mejora y la percepción del mundo y de nosotros mismos cambia para mejor. Nos
sentimos más felices, más cariñosos y más relajados.
Espero que te haya aportado claridad y que pueda contribuir a una mejora personal, si tienes alguna duda sobre en algún tema tratado puedes dejarme un comentario aquí más abajo o escribirme a info@alejandrorodriguezdiaz.com para cualquier tipo de duda que tengas, estaré encantado de poder atenderte, sin más me despido esperando que tenga unas muy felices fiestas.
Un saludo.
Alejandro.
Mi nombre es Alejandro Rodríguez y acompaño a personas que quieren dar un giro a sus vidas porque se encuentran emocionalmente atascadas por un trauma, alguna dependencia adictiva o alguna situación que han vivido y que les ha hecho desconectarse de sus mayores potencialidades a conectar con su interior y dar el CAMBIO DE RUMBO en sus vidas que realmente anhelan.
Si quieres saber cómo puedo ayudarte a conseguir ese cambio de rumbo en tu vida que te haga conectar con tus valores principales y recuperar tu verdadera esencia. mira lo que tengo preparado para ti